Existen varios tipos de arcilla, diferenciados faacilmente por su color, cada una con unas propiedades diferentes, por lo que imprescindible saber cuál es la conveniente según lo que queramos conseguir.

Para preparar y conservar las arcillas hay que tener en cuenta que hay que utilizar envases de cristal y manipular con espátulas de madera, y realizar la mezcla con agua mineral, evitando la clorada del grifo.

Si queremos conservar la mezcla para posteriores usos, tenemos que guardarla bien cerrada en un bote de cristal.

ARCILLA BLANCA

Se le conoce también como caolín. La arcilla blanca está indicada especialmente para pieles sensibles, porque es más suave y menos abrasiva que la verde.

Regula el pH de la piel por lo que se utiliza ampliamente en la producción de cremas para la piel, máscaras faciales y jabón.

Tiene un efecto tensor y ayuda a combatir la flacidez.

Entre sus componentes encontramos el silicio o el aluminio. Destacan sus propiedades antibacteriana, desinfectante y astringente.

ARCILLA VERDE

Disminuye la inflamación además de usarse como desintoxicante por su alto nivel de oligoelementos. es la más apropiada si tienes una piel grasa, incluso mixta. Tiene un efecto regenerador, y contribuye en la disminución de las cicatrices gracias a su elevada concentración en oligoelementos y sílice. Con ella se pueden tratar casos de inflamación y enrojecimiento haciendo cataplasmas para poner sobre la piel. Sólo es recomendable para personas con piel grasa.

-Disminución de impurezas y puntos negros

-Piel más elástica con un uso continuado

-Regulará la grasa de la piel

ARCILLA ROJA

Muy conocida por los fisioterapéuras, disminuye la inflamación y es especialmente útil en los procesos que incluyen algún derrame sanguíneo interno.

De esta forma en casos de contusiones, esguinces o roturas dde fibras, podremos hacer un estupendo emplasto con polvos de arcilla roja y vinagre de vino tinto.

Aplicar el emplasto varias veces al día, al menos durante mínimo 2 días. Se puede poner entre 2 y 5 días, más no porque causaría irritación en esa zona de la piel.

Aplicar generosamente en la zona a tratar, envolverlo con papel,  después vendarlo con film de cocina para que no se caiga el emplasto.

ARCILLA ROSA

Es la combinación de la arcilla blanca y la roja. Su uso más común es para pieles muy sensibles y reactivas

ARCILLA AMARILLA

Esta arcilla recibe este nombre a causa de las altas cantidades de hierro y potasio que contiene y que tan beneficiosos son para el organismo. Recomendada para pieles muy grasas y con acné.

Así que ahora que conoces qué arcilla es la idónea para ti, ya puedes disfrutar de sus propiedades, y no estaría de más tener en un botecito de cristal preparado un emplasto de arcilla roja, para posibles contusiones o golpes.

También hay arcillas ya preparadas y conservadas en prácticos envases. ¡Tú decides!